lunes, 9 de enero de 2012

El punto G en los hombres...

...No es otro que la próstata, o lo que algunos llaman punto "P". Es un punto un tanto controvertido para los hombres, debido a su ubicación, y por ende, a su forma de acceder a estimularlo para que el hombre logre placer: metiendo un dedo por el ano. Por esta razón, muchos hombres heterosexuales se niegan a experimentarlo para no tener que introducirles un dedo por ese orificio. Y esto sin hablar de la negativa de muchas mujeres de introducir un dedo en el ano de su pareja.

Hablando de ello, no hace mucho, en una reunión entre mujeres, surgió el tema de la negativa de meter el dedo en el ano a un hombre. Una de las asistentes, justamente la que sacó el tema, se negaba rotundamente a introducir nada en el trasero de su pareja. Recuerdo haberle comentado por que negar a una persona su punto de placer, (en caso de que él estuviera de acuerdo) y fue muy gracioso porque siguió negándose, rotundamente a practicarlo.

Eso es algo muy importante: por más que sea un punto de placer, y haya hombres que les guste que le rocen el ano, o le metan el dedo dentro para tocar su punto "P", es muy pero que muy importante saber que el hombre este de acuerdo con que lo hagas; porque si es de los hombres que bajo ningún concepto quieren que les toques su trasero, igual te metes en un problema muy grande.

También hay que tener en cuenta, que a muchos hombres les gusta que juegues con delicadeza con su agujero, pero no quiere por nada del mundo que le hables de él, y menos que le digas que le gusta. Muchos recuerdan un episodio de la serie "Sex and the city" donde a una de sus protagonistas, Miranda, le ocurre este problema.

Para las que no quieran ni intentarlo con el dedo por el trasero, hay otras formas exteriores de estimularlo: en la zona que va desde los testículos hasta el ano, ( la zona del periné) hacer un suave masaje sin presionar demasiado ayuda a estimularlo, porque por esa zona hay terminaciones nerviosas. Aunque es posible que no sea tan intenso como tocarlo por vía anal.

Y para las que se atrevan con todo, y sus parejas se lo permitan, pueden hacer lo siguiente: previa higiene anal del hombre, podéis introducir un dedo con un poco de vaselina por el recto. Les dejaré un gráfico para que entiendan como y hasta donde tenéis que introducir el dedo. 

Es posible que muchos hombres  heterosexuales se nieguen a probarlo por un tema de masculinidad,  pero en mi opinión, en el sexo hay que experimentar los placeres y quitarse los miedos. Los hombres que no tienen complejos y se atreven a probarlo, disfrutan muchísimo.  




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